La manifestación de este 8 de marzo en la capital poblana, concluyó en un enfrentamiento entre elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) y las mujeres que salieron a las calles a marchar.
Humo, agua y gas lacrimógeno fue lo que los elementos lanzaron en repetidas ocasiones a las mujeres que expresaron su indignación por la falta de justicia para las personas desaparecidas, las víctimas de violencia y todas aquellas que sufren alguna situación de injusticia.
Por primera vez el Ayuntamiento de Puebla, encabezado por Adán Domínguez, determinó poner barreras para proteger los inmuebles.
Si bien algunos grupos feministas optaron por derribarlos, los elementos de seguridad que estaban al interior no dudaron en replegarlos mediante el uso de agua y humo.
Los ánimos se encendieron y fue cuando las mujeres, apoyadas por algunos hombres, lograron derribar una de las estructuras. Ante este hecho los policías lanzaron gas lacrimógeno y agua.
De esta acción tanto mujeres como periodistas que cubrían la manifestación, resultaron afectados.
Algunas mujeres lanzaron palos y otros objetos, los cuales los policías los regresaban. Incluso cuando ingresó el grupo ROCA, algunos elementos tuvieron comentarios denigrantes hacia las manifestantes.
Por primera ocasión el gobierno municipal decide arremeter contra las manifestantes, incluso hubo una mujer detenida de nombre Michelle, que posteriormente fue liberada.
Por Mayte González
