En una audiencia que ha generado gran controversia, la jueza Angélica del Carmen Ortuño Suárez ha determinado que Mario Marín, exgobernador de Puebla, no amerita prisión preventiva por los delitos de tortura y protección de redes de trata infantil.
La decisión causó indignación entre las partes afectadas y la sociedad civil, quienes esperaban una sentencia firme en contra del exmandatario.
Durante la audiencia, la jueza Ortuño Suárez le impuso a Marín una multa de tan solo 100 mil pesos.
La liberación de Marín se da justo cuando se esperaba que se dictara una sentencia definitiva en su contra.
Las redes sociales han reaccionado con el hashtag #MarioMarín, criticando duramente la resolución y poniendo en duda la imparcialidad de la jueza y la influencia que el exgobernador podría tener en el sistema judicial mexicano.
La periodista Lydia Cacho manifestó su preocupación e hizo un llamado a la Suprema Corte de Justicia de la Nación y la ministra presidenta Norma Lucía Piña, para realizar una revisión del caso.
El exgobernador de Puebla está acusado de tortura y la protección de redes de trata infantil.
Mayte González